Malcriados

Vivimos en un mundo malcriado.

Todo lo que necesitamos ,todo lo que queremos E INCLUSO LO QUE NO, lo tenemos.

Tan acostumbrados a simplemente estirar el brazo y obtenerlo estamos que ni siquiera nos damos cuenta de lo que tomamos...

Hasta que ya no lo encontramos.

Cuando, para variar, una vez entre muchas, algo a lo que estamos acostumbrados desaparece nos empesamos a dar cuenta de lo que realmente significaba eso que para nosotros era tan corriente, que no era nada. Es en este punto en el que pueden ocurrir varias cosas.

Podemos darnos cuenta de que en realidad esto que extrañamos no era más que una costumbre, capricho si así se le prefiere llamar, que no necesitamos y es más, que puede no ser bueno para nosotros.

También podemos notar que en realidad no poníamos importancia a algo que nos era de suma importancia, pero a lo que estábamos tan acostumbrados que no veíamos cuan importante era.

Enonces podría decirse que es conveniente mantener los ojos abiertos a lo que está a nuestro alrededor, para poder darle a todo su VERDADERO valor, ni más, ni menos.

Pero nunca debemos tener miedo de observar al rededor.

(Nota: Imagen = Abaporu, Tarsila do amaral)