Sentís que las cosas cambiaron pero en realidad sabés que no es así, que todo es igual que antes y que puede ser que así haya sido desde siempre y siempre lo vaya a ser, y sonreís, porque sabés que es facil pero a la vez te duele porque te rompe el alma a la mitad aunque ya dijiste eso por tantas cosas boludas que decirlo por una más no hace que te importe, ni que le importe a lso demás porque todos ya escuchamos esas mil veces anteriores. Y seguís viviendo porque sabés que es lo mejor para vos pero también sabés que no va a cambiar nada porque nunca lo hizo y si te engañaste cada tanto haciendote creer que habái cambiado para volver luego a la primer perspectiva está bien, porque vivís de sensaciones y sos más feliz y son más felices con vos no dándote cuenta de las cosas o ignorandolas olímpicamente.
Porque si vos no le das importancia, o, si vos sabés que no hay manera de darle importancia sin cagarlo todo, ¿quién te va a contradecir?
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Jugadas.