Secretos.
Si nos fijamos, son un pacto silencioso entre todos nosotros. Ninguno va por ahí diciendo "tengo un secreto que no me dejo contarte" (bueno, en algún caso sí, pero you get my point), y aunque no lo hagamos, todos sabemos que el otro tiene secretos, así como nosotros los tenemos...
Ahora, ¿cuántos?
Si te preguntan qué no sabés sobre alguien te puede resultar muy fácil la respuesta, porque vas a lo obvio; quiero decir, una respuesta rápida sería: "La cantidad de veces que inhaló ayer".
Ahora, si no ponemos a profundizar, ¿cuánto sabemos del otro?
De entrada creemos que sabemos sobre el otro lo que el otro sabe sobre nosotros.
Sin embargo, si nos presentan la idea de que por ahí sabemos muy poco de todo lo que hay para saber sobre el otro, nos pueden llegar a mover el piso monumentalmente.
Sí, es verdad, me pasó. ¿Por qué negarlo?
En mi opinión (y para eso estamos en mi blog, para que de mi opinión), lo importante no es esto. Sí, que te confíen las cosas es una de las más importantes demostraciones de que le importás al otro, pero no lo suficiente como para interpretar que su amistad (o la relación que tengan) no es valedera. Si no te lo contó, ya fue, seguí viviendo feliz. 'Cause we are human after all. (Escuchen "only human" the Jason Mraz porque es genial, como todo lo suyo :3). N opienses demasiado las cosas salvo que no te quede otra, porque así es más fácil vivir, y en última instancia buscá un abrazo, que es la mejor cura para todo.
Además, si querés que te cuenten las cosas, probá que son incondicional y confiable ;) Está ahí...
Give your heart out,
because love begets love
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